Con estas palabras es que Rafael Balanzá se presentó para hablar acerca de su nueva novela `Recado de un Muerto´. Este ganador del premio Café Gijón por su novela `Los Asesinos Lentos´ está convencido de que los problemas de la literatura española se encuentran depositados en su sociedad, dando como consejo el encontrar armonía entre la vocación y lo que el mercado permite publicar.
Con estas palabras es que hago la relación con una noticia menos importante, pero igual de interesante al ponerla en el mismo contexto...
`Flappy Bird´ es retirada del mercado por su creador. Este sencillo (y a mi punto de vista estúpido) juego en forma de app para móviles ha sido descargada por más de 60 millones de usuarios en las últimas semanas. Este juego creado por un joven vietnamita ha sido eliminado del mercado pese a significar un ingreso diario de 50 mil dólares, pues "le está arruinando la vida".
Entonces es cuando podemos observar cómo es que estas palabras nos muestran un reflejo de lo que realmente somos, una sociedad con poca cultura. Una masa de personas que no se encuentra ni produciendo, ni demandando productos de calidad intelectual. De este modo es que esos famosos `anónimos´ creadores odian las creaciones ajenas tanto como las propias en ciertas ocasiones.
"El clima social no es propicio para lo que yo entiendo como literatura", afirma Rafael Balanzá.
Enlace de noticia Original: http://www.elmundo.es/cultura/2014/02/01/52ea2bfde2704eee0b8b4575.html
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